¿Un cuento chino?

La misión secreta del secretario de Hacienda de Armenia y la asesora de despacho del alcalde Padilla en Tianjin y Beijing deja más preguntas que certezas.
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Lo que comenzó como un rumor de pasillo terminó revelando una realidad inquietante en la administración de Armenia. Una agenda internacional manejada con total discreción por la alcaldía llevó a Yeison Pérez, secretario de Hacienda del municipio, y a Gloria Gutiérrez, asesora del alcalde James Padilla García, hasta la República Popular China. Allí, entre reuniones en Beijing y Tianjin, se anunciaron avances en cooperación bilateral con énfasis en educación, energías renovables y comercio exterior.
Pero más allá de los titulares, la misión ha dejado un cúmulo de interrogantes que la administración aún no responde. Desde la falta de transparencia en la preparación del viaje, hasta la idoneidad de los funcionarios elegidos para representar al municipio, los cuestionamientos se multiplican. Y en medio de ellos, una pregunta que no puede pasarse por alto: ¿qué hacía allí Gloria Gutiérrez, asesora del despacho, sin competencias técnicas en ninguna de las áreas tratadas?
Una misión reservada que se filtró por la puerta trasera
La información no llegó por canales oficiales. Fue un secreto a voces dentro del edificio de la Alcaldía de Armenia. Funcionarios hablaban en voz baja, pero sabían que tenían prohibido referirse al tema. Fue FINITO quien, el 8 de abril, comenzó a hacer preguntas directas a los voceros de la administración. La respuesta fue el silencio absoluto.
Sin embargo, esa misma tarde, la confirmación no vino por un boletín de prensa ni en una rueda oficial: fue Yeison Pérez, desde China, quien decidió hablar con un medio (Comunicación Quindío) y dar detalles sobre los acuerdos que se estaban firmando. Es decir, la administración mantuvo el viaje en secreto hasta que ya no pudo contener los rumores.
Link del mensaje: https://web.facebook.com/61574772003082/videos/1929963407809262
Ese manejo oscuro de la información pública deja un mal sabor. Porque una misión oficial no puede hacerse a espaldas de la ciudadanía. Si los compromisos firmados afectan los recursos de los armenios, su socialización no es opcional: es una obligación.
Y, además, ¿por qué el silencio sobre el acompañamiento de Gloria Gutiérrez? ¿Cuál era su rol en esta misión?
¿Por qué el secretario de Hacienda?
La misión de aproximadamente 15 días, según se supo, giró en torno a tres grandes ejes: Cooperación en educación, incluyendo un convenio con la Universidad de Tianjin que buscaría fortalecer la enseñanza desde básica hasta superior y fomentar el aprendizaje del idioma mandarín. Exploración de inversión en energía solar y tecnologías limpias, y apertura de canales de comercio exterior para el café quindiano.
Pero entonces surge una pregunta inevitable: ¿por qué lideró esta misión el secretario de Hacienda? Estos temas son, claramente, competencia de otras dependencias: Educación, Desarrollo Económico y Amables. Que Yeison Pérez estuviera al frente y no los secretarios expertos en los temas genera preocupación sobre la forma en que se toman las decisiones estratégicas en la alcaldía.
¿Y Gloria Gutiérrez qué hacía allí?
La otra gran pregunta que no ha sido respondida: ¿qué papel jugó Gloria Gutiérrez en esta misión? No es secretaria de despacho. No tiene competencias técnicas en comercio, educación ni energía. Es asesora del alcalde, y su inclusión en esta delegación genera serios cuestionamientos sobre el verdadero propósito del viaje.
¿Fue una observadora? ¿Una representante del despacho? ¿Un gesto de confianza del alcalde? ¿Fue invitada por las instituciones chinas o simplemente incluida por decisión política?
Si la presencia de Pérez genera dudas, la de Gutiérrez las multiplica. Porque en vez de llevar a los jefes de las carteras competentes, la alcaldía optó por enviar a dos figuras del círculo de confianza del alcalde, sin mayor conexión con los temas tratados. ¿Fue entonces un viaje de gestión o un viaje de privilegio?
¿Un premio para el cobrador de impuestos?
No se puede ignorar el contexto. En los últimos meses, Yeison Pérez ha sido uno de los funcionarios más criticados de la administración Padilla, especialmente por su papel en el cobro del impuesto predial, tras la actualización de los avalúos catastrales. Para muchos, se convirtió en el rostro de la inconformidad ciudadana, el cobrador que llegó a aplicar un tributo considerado desproporcionado por gran parte de la población.
En plena Semana Santa, la comparación con un personaje bíblico no pasó desapercibida: así como algunos eran condenados a cargar la cruz, Pérez ha cargado el peso de una medida impopular.
Frente a esto, cabe preguntarse: ¿fue este viaje una especie de premio o respiro? Un gesto político de alivio para quien ha hecho el trabajo más incómodo. Una forma de decir: «Gracias por aguantar los golpes». Porque mientras en Armenia los ciudadanos enfrentaban el calvario del pago del predial, Pérez aterrizaba en Tianjin para hablar de cooperación internacional.
Y en ese mismo avión, ¿por qué iba también Gloria Gutiérrez? ¿Era parte de ese mismo reconocimiento silencioso? Las preguntas sin respuesta:
El viaje ya ocurrió, pero las dudas siguen sobre la mesa.
¿La invitación fue dirigida específicamente a Pérez y Gutiérrez?
¿Existió un acto administrativo que autorizara la comisión?
¿A cuánto ascendieron los viáticos pagados por la alcaldía de Armenia a estos funcionarios?
¿Cuál fue el criterio para excluir a los secretarios de Educación, Desarrollo Económico y Amables?
¿Cuándo se entregarán los informes, actas y pruebas documentales de los acuerdos?
¿Cuál fue el verdadero rol de Gutiérrez durante la visita?
Hasta ahora, no se ha entregado ni un solo documento oficial. Solo declaraciones vagas, sin respaldo técnico, jurídico ni presupuestal. Y eso no basta para una misión internacional que compromete la imagen —y tal vez los recursos— de un municipio.
Palabras, titulares… ¿y hechos?
Como ocurre con frecuencia en Colombia, muchos convenios internacionales se anuncian con entusiasmo, pero se pierden entre el papeleo o la indiferencia administrativa. La clave está en el seguimiento. Que los anuncios no se queden en titulares. Que los convenios se conviertan en programas reales, inversión concreta y beneficios palpables para los ciudadanos.
Porque si no hay resultados, esta visita no será más que un viaje simbólico, una estrategia de distracción, o incluso una recompensa disfrazada para quienes han sostenido a la administración en los momentos más duros.
La tensión sigue en casa
Mientras en China se hablaba de cooperación y futuro, en Armenia los contribuyentes seguían recibiendo las facturas del predial. Para Pérez, fue un respiro temporal; para el pueblo, la carga sigue siendo diaria y pesada. Y aunque Gloria Gutiérrez volvió con él, todavía nadie puede responder con certeza: ¿a qué fue? La misión concluyó. Lo que viene ahora será definitivo: demostrar con hechos que no fue solo un cuento chino.
Aquí Finito

GS Oliver
Comunicador social – periodista